La diputada del Partido Demócrata Cristiano (PDC), Norma Piérola, cuestionó el trabajo de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara Baja, porque no pidió informes al ministro de Gobierno, Carlos Romero, cuando la Policía reprimió a las personas con discapacidad. Sin embargo, ahora el trato es distinto cuando se trata del conflicto con los cooperativistas mineros. La legisladora atribuyó este comportamiento a intereses políticos.
“Los cooperativistas cogobiernan con el Movimiento Al Socialismo (MAS), porque hay representantes del sector como diputados, senadores y con cargos en instituciones públicas, elemento que sirve para que las persona lideren manifestaciones, con ese objetivo”, explicó.
Según Piérola, “al Gobierno le conviene estar bien con los cooperativistas”, porque es un grupo grande del país que le dio apoyo político en elecciones lo cual se verifica con las alianzas firmadas con el sector.
Por este motivo, la Comisión de Derecho Humanos presidida por un parlamentario del MAS recién pide informe sobre la violencia en la reciente movilización.
En cambio, en el caso de las personas con discapacidad que es un grupo reducido, la Comisión de Derechos Humanos ni siquiera puso sus bueno oficios para mediar con el Gobierno.
“Es importante tomar en cuenta que los discapacitados al ser pocos en el país, no fueron vistos como una amenaza para una contienda electoral”, indicó Piérola, haciendo énfasis al cálculo político de parte del Gobierno.
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